martes, 29 de junio de 2010

Código de Barras Biológico

El proyecto del código de barras genético nació en Canadá en 2003 cuando Paul Hebert, científico del Instituto de Biodiversidad de Ontario, en la Universidad de Guelph, descubrió una pequeña porción de un gen que funciona como un identificador de animales y plantas casi infalible. La secuencia está presente en todas las células y muestra variaciones relacionadas con su recorrido evolutivo. Desde entonces, el proyecto ha acaparado códigos a una velocidad vertiginosa. Si en 2007 su base de datos atesoraba 31 mil especies, ahora tiene más del doble, gracias en parte a la colaboración de 170 instituciones científicas en más de 50 países. Su objetivo es alcanzar el medio millón en cinco años. Su creador aspira a tener en 2025 el código de todas las especies conocidas, unos cinco millones.
Esta herramienta jugará un papel fundamental en campos tan dispares como el estudio de la biodiversidad, la lucha contra las enfermedades o el contrabando de especies protegidas o no permitidas. Además, el código de barras tendrá muchas aplicaciones en el análisis de alimentos. "Científicos expertos en biodiversidad están usando esta técnica genética para desentrañar misterios, de modo muy similar al que los detectives usan para resolver crímenes", declaró Schindel, secretario ejecutivo del Consorcio del Código de Barra de la Vida (CBOL, por sus siglas en inglés)
Poder descifrar cierta porción de un gen que funciona como identificador de animales y plantas será muy útil para tener un registro de la vasta biodiversidad, cómo se relacionan los seres vivos y aprender sobre comportamientos desconocidos de ciertas especies.
Esta aplicación del código de barras del ADN para descubrir las complejas dinámicas de la naturaleza constituye todo un nuevo campo de investigación, que puede tener importantes consecuencias en materia de conservación y puede ayudar a trazar mapas de la distribución de cada especie.Otro importante empleo es la distinción de las diferentes especies de mosquitos implicadas en la transmisión de enfermedades como la malaria, un arduo trabajo llevado a cabo por los taxonomistas de mosquitos y al que el código de barras genético puede ayudar mucho.

Por lo visto esto recién empieza y con esta nueva herramienta se abre un abanico de posibilidades y oportunidades…esperemos que sea la ética la principal premisa en la utilización e implementación del código de barras biológico. Porque la ciencia es neutral, no es ni buena ni mala, son los hombres quienes la instrumentalizan para el bien o el mal. Son quienes ejercen el poder los que deciden para qué utilizarán el saber y los productos generados por los científicos. Como dicen Gregorio Klimovsky o Enrique Marí: la ciencia es un martillo que puede ser utilizado por quien lo posee para construir un mueble o para matar a alguien, pero el martillo en sí, así como quién lo construyó, nada tiene que ver con el uso perverso que pudiera dársele.

jueves, 3 de junio de 2010

VIII Semana de la Ciencia y Tecnología

Desde el 7 al 18 de junio se celebra en todo el país la Semana Nacional de la Ciencia y Tecnología.
El objetivo de este evento anual es articular las diferentes esferas del sistema educativo y científico, estableciendo un diálogo con la comunidad educativa acerca de los desarrollos en el ámbito científico tecnológico, y buscando despertar en los jóvenes el interés por dichas disciplinas.
Con motivo de este encuentro, los laboratorios y clubes de ciencias, Universidades, centros culturales, empresas, ONGs y museos de todo el país abrirán sus puertas a estudiantes y docentes. Se llevarán a cabo charlas, experimentos, visitas guiadas, ciclos de cine científico y otras actividades.

Para enterarte del cronograma de actividades podes visitar esta página: http://www.semanadelaciencia.mincyt.gov.ar/ o podes escribir a cienciaytecnologiaba@yahoo.com.ar y octavasemanacyt@mincyt.gov.ar

martes, 1 de junio de 2010

5 DE JUNIO "DIA MUNDIAL DEL MEDIOAMBIENTE"


MUCHAS ESPECIES, UN PLANETA, UN FUTURO

Naciones Unidas, 1/6/2010, (Ecoestrategia).- El cinco de junio de 1972 se celebró por vez primera el Día Mundial del Medio Ambiente (WED, por sus siglas en inglés) en el marco de la Conferencia de Estocolmo sobre el Medio Ambiente Humano, la primera gran reunión internacional sobre el tema medioambiental convocada por el sistema de Naciones Unidas. Esta conmemoración es uno de los principales vehículos a través del cual la ONU fomenta una conciencia hacia la conservación y el uso sostenible de los recursos naturales y motiva una atención y acción política.
En este día también se pretende proporcionar un rostro humano a la problemática ambiental y permitir a la gente el darse cuenta no solo de su responsabilidad sino también de la capacidad que tienen de convertirse en agentes del cambio para lograr un desarrollo sostenible y equitativo. También un día para convocar cooperaciones entre los grupos de interés o tal vez, aún más correctamente, entre todas las especies que habitan este planeta y comparten un futuro común.
En este año 2010 será Ruanda, un país del este de África que está adoptando una transición hacia una economía verde, el anfitrión internacional del Día Mundial del Medio Ambiente, por decisión del Programa de las Naciones Unidas para el Medio Ambiente (PNUMA).
Asimismo, el tema de este año es “Muchas Especies. Un Planeta. Un Futuro”, mensaje que se enfoca en la importancia vital para el bienestar de la humanidad y para las especies y ecosistemas del planeta. Es así como el tema del WED también apoya el Año Internacional de la Diversidad Biológica celebrado en este 2010.
La Combinación de la riqueza ambiental de Ruanda, incluyendo las especies raras y económicamente importantes tales como el gorila de montaña, aliado a las pioneras y nuevas políticas verdes que el país está implementando, es una de las muchas razones del porque el PNUMA decidió que Ruanda fuese el anfitrión mundial de esta celebración en 2010.